El día en que se me cayeron los chones jajaja

Hoy fue ese día.
Mi trabajo no siempre es de terror, hace una semana (+ ó -) que estamos llenos y aunque he dormido muy poco, no he comido bien, y tengo ojeras tipo zombie, me la estoy pasando re-bien. 
En primera porque esto es lo que me gusta, estar activa, hacer cosas, no estar todo el día en la oficina, escuchando boberas del Sr. Director. Peroooooo esa no es la razón por la cual se me cayeron los chones hoy. Después de trabajar todo el día en La Loma llegué a las 6 pm desmoralizada a la oficina, ya que quería estar en Casitas a las 3, porque a esa hora llegaba un huésped que moría por conocer; recibíamos a Gael García Bernal, su esposa y su bebé y yo quería estar ahí para recibirlos, así pues llegué a la oficina y pregunté:"¿Qué tal, cómo les fue?!" Y me dijeron: "mugre suertuda, aún no llega!" la verdad es que ya eran las 6 y llevaba todo el día dando vueltas, tours, agendando actividades, y estaba exhausta, pero me valió y en cuanto llegó fui a recibirlo. Y fue ahí donde sentí que se me cayeron los chones, obviamente, fingí demencia, actué como si nada, lo saludé como a cualquier otro huésped, le dije a su esposa que su bebé estaba muy lindo (lo está) y los llevé a su casita. El sr. se quedó un tanto sacado de onda, como que esperaba que lo recibiera un séquito de fans, o que le hicieramos cara de aaaahhh!!!! pero mantuve mi temple y lo traté como a cualquier otro, pero cuando regresé a la oficina mi jefa dijo: "¿Qué tal? ya te puedes subir los chones?" jajajaja y la verdad es que fue genial, es re-aliviando, viaja con su guitarra; se ve bohemio y encantador y hace una pareja hermosa con su esposa y su bebé. 
Creo que ni cuando vino Kevin Spacey me emocioné tanto! De hecho hay varias celebridades ahorita en Cuixmala, el actor que hizo Shakespeare in Love y otros no tan conocidos, pero Don Gael García hizo que se me cayeran los chones, tal vez no tanto como la vez que en el Quinta Real vi a Gabriel García Márquez le dije: "buenas tardes" y él respondió "buenas tardes", mientras yo pasaba por el restaurante con una bandeja de comida, pero sí como para decir "ay siñora es que está ri-guapi!!".